Se fue a la zona roja. Quería verlas emplumar. Desde la distancia impuesta por sus guardaespaldas miraba de frente o reojo la altura de una liga, lo empinado del tacón. Se dejó caer en el mullido sillón y empezó a cacacarear como gallina. Los periodistas asentían, regodeándose. Pronto la entrevista estaría en cada red social, como prostituta en vidriera. Ella presumía el alcance de su pico abierto, con esa lengüita corta y seca, mientras en la entrepierna calculaba el precio de su huevo.
6 ¿Qué me cuentas?:
regular la prostitucion es legalizar la esclavitud
Las risas con el chistecito de la mujer cubana prostituyéndose para pagar al plomero es una infamia ante las que faltan las palabras y el aliento.
Si hay un ejemplo de "mujer nueva" es ella.
Estoy por lo dicho por Fango. Me encantó tu breve pero clarito relato. Muchos saludos.
Fango, ojalá no sea por ahí el camino, pero son tantos años envilecida esa parte de la sociedad que se desconocen cifras oficiales. El camino de la carne está muy lejos del trillo que nos enseñaron, en el que creimos.
Goma, un verdadero desastre cualquier reunión donde se dice: Soy cubana. Y los comentarios, las interrogantes y los criterios ahora van dirigidos hacia esta nefasta situación.
Lao, creía que aún andaba de viajero. Poco tiempo he tenido para viajar por los blog y en esta tierra que me ha tocado es corto el camino. Espero que todo este asunto llegue a solucionarse, presionados por tantas mujeres que viven allá de esfuerzo y no de tacón.
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