Ella, sentada sobre el tronco seco, parecía una rama torcida. El tiraba piedritas al río espantando nada. Ella le preguntaba al árbol sobre su historia de amor con pájaros y nubes, cuando él se acercó, taimado y le echó el río sobre los hombros. Desde ese día, vaga una criatura, busca un nombre, maldice al que se metió en su cuerpo con murmullo de ramas y de agua.
6 ¿Qué me cuentas?:
Corta e inquietante historia, estimada Belkys.
Te mando un beso austral.
“La obra perfecta de la agresividad es conseguir que la víctima admire al verdugo.”
Victoria Sau, psicóloga
"Eres un alma que sostiene a un cadáver" escribió Epicteto, siglos antes de Cristo. Pero hay mucha gente sin alma,añado yo,que producen cadáveres.
Excelente entrada Belkis.
Cuando una mujer es golpeada o maltratada ese agua del río lleva las turbulencias de un rencor que no logra amainar ni su llegada a mar abierto.
Besos.
A veces un acto de rencor se realiza por miedo a admitir que el amor es el mejor camino.....Muchos saludos.
Es precioso, Belkys, yo lo veo más como la maldición de un amor falso que como una agresión, qué bonito entonces, qué poético, el "le echó el río sobre los hombros",y ese murmullo de ramas y aguas que la invadió desde entonces. Bravo
Saludos blo
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