22 mayo, 2012

Ego


El escritor larvado detrás de su obra, teclea una barricada de silencios. Ella evitaba la tendedera  en la nube. Como  lectora debía lidiar con un monólogo cada vez más doloroso. Se inventaba un sabor para la admiración oculta allá detrás de su avatar .  Y al principio tocaba la pantalla como si le acariciara a él, la barba de tres días. Imaginaba el diálogo al pie de la ventana y el ciprés. Pero ahora,  después de comentarios sin respuestas; jalonea el monitor y le espeta groserías. El escritor se pregunta, a diario,  por qué nadie lo viene a leer.

6 ¿Qué me cuentas?:

V dijo...

Francamente sugerente. Unono puede evitar colocarse en esa tesitura y conjugar en primera persona. Puedo disfrutar del texto y no añadir nada más.Puedo manifestarte el talento que exhibes.
Pero en lo que nunca se debe caer es en esa sorda guerra inutil de egos. Lo expones con absoluta precisión. Enhorabuena. Saludos

Belkys Pulido dijo...

Gracias, V, escribo sobre el ego como un leit motiv lo acabo de descubrir en estos días, quizás ha sido una batalla personal, también con la distancia de mi tierra, aderezando.

Azpeitia poeta y escritor dijo...

Porque somos pocos los que deseamos leer por encima de la TV, el fútbol, ect....enhorabuena por tu calidad descriptiva...un abrazo desde azpeitia

Juan Herrezuelo dijo...

¿Por qué, pregunta? Acaso porque los silencios que teclea no tienen el valor que él les adjudica, o porque realmente creyó, como insinuaba la placa junto al portón sin ciprés, que ese silencio de maderas cerradas era un atajo al cielo. Un saludo.

Belkys Pulido dijo...

Azpeitia, enamorados aparentes del silencio. Condenados a huir del otro porque no sabemos estar ni con nosotros mismos. Gracias por venir.

Belkys Pulido dijo...

Con el ego, enamorados, algunos bailan una danza macabra que les corta los cipreses de raíz y las puertas les tiran de las narices como podridos brazos hacia arriba. Atrapados se inventan amores. Las lectoras primerizas les creen, cercan sus libros o sus blogs con la esperanza de encontrar un atajo creativo o un trillo hacia la carne del otro. Juan Herrezuelo un comentario que he leído varias veces y me ha dado otras ideas enyerbadas.

LinkWithin

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...