Conservo en uno de mis huacales el segundo ejemplar de La Hiena Triste. Órgano vital y enhiesto de la Sección de Humorismo de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, como lo describía su consejo editorial. Es del año 1986.
Formaba parte del Consejo de Dirección Rapi Diego, uno de los ilustradores de libros infantiles más originales de Cuba, también cineasta y amante del jazz y del blues.
Comparto en lectura expresiva, un cuento de Rapi, ilustrado también por él. La anfisbaena Triste, detrás de la aparente inocencia de este escrito he encontrado muchas claves, armonizan mi destino hoy. La principal no me he podido desprender ese dolor intenso que clava la muerte de una estirpe, aunque no es la muerte literal porque como las tardes lloradas por la anfisbaena, multiplicadas o eternizadas han de venir siempre esas lecturas, esos dibujos, aquellas frases que apuntalaron mi identidad.
La llaman anfisbaena porque tiene dos cabezas, Una cabeza se halla en el lugar adecuado, y la otra en la cola. Lucano escribe de ella: Alzándose sobre sus cabezas gemelas, llega peligrosa la Amphisbaena, y sus ojos brillan como lámparas. Bestiario Medieval. Edic. Ciruela. Acompaña al texto la reproducción de una miniatura del Bestiario de Oxford que incluyo como parte de mi ilustración.
La que yo conocí no presentaba la amenazante figura de dragón afaisarranado con que nos la presenta el Bestiario de Oxford, ni la peligrosa apariencia a la que se refiere Lucano, pero sí tenía y claramente apreciables, dos melancólicas cabezas, una en la cola y otra en el lugar adecuado, que respondía a algo pomposo nombre de arabella. (Lamentablemente nunca llegué a saber cómo se llamaba la cabeza de atrás) De modo que me pareció acertado considerarla como una especie casera de anfisbaena criolla.
Texto de Rapi Diego
Y para quienes andan buscando compartir lecturas y libros con sus niños, una sugerencia:
http://archivodeconnie.annaillustration.com/?p=495
8 ¿Qué me cuentas?:
1,2,3 probando...
Parece que sí funciona, pero estamos en temporada de cazacomentarios o huyecomentarios, qué silencio. Voy a llorar como la anfisbaena...
belkys, ahora me doy cuenta que algo pasa, porque te dejé un comentario y no salió. Te decía que era muy lindo este homenaje a los Diego, y que yo recuerdo muchop un librito con ilustraciones de Rapi que tenía el poema de sapito y sapón de guillén
El ilustró un libro de Nicolás Guillén, desgraciadamente en mis libreros allá, volaron entre otros toda la poesía de Guillén. Alguien de la familia quizás los vendió a un extranjero. Charlene, qué estirpe de poetas los leo y me descubren mil caminos
sí que lo son. Me voy al otro post. Sigo embobada con el homenaje
Gracias, Charly, qué bueno andes por acá.
Recién ahora escuché el audio. Muy bueno
Gracias, Char, me pareció simpático con cierta inocente ironía.
Publicar un comentario