Salvador Elizondo ha sido un descubrimiento para
mí, siguiendo los pasos de José de la Colina he topado con el Escritor. Todos
los homenajes van cuando el genio poético se ha quedado como referencia, cuando
la vejez de un Centenario intenta espantar a las polillas y al frente del coro,
un fantasma dice:
La luz hace del muro indiferente
un espectral teatro de reflejos.
En el centro de un ojo me descubro;
no me mira, me miro en su mirada.
Se disipa el instante. Sin moverme,
yo me quedo y me voy: soy una pausa. Octavio Paz
un espectral teatro de reflejos.
En el centro de un ojo me descubro;
no me mira, me miro en su mirada.
Se disipa el instante. Sin moverme,
yo me quedo y me voy: soy una pausa. Octavio Paz
Elena
Poniatoswka entrevistó a Salvador.
-México es para mí el país mejor del mundo
-Y, ¿tú estás orgulloso de ser mexicano?
-Sí, lo estoy. México, que antes me parecía horrible, es ahora para mí
el país mejor del mundo. ¿Por qué? Porque descubrí a los indios. Mira: los
franceses, los ingleses, los alemanes, comparados con los indios, no saben
nada. Los intelectuales europeos son esencialmente necios. ¿Por qué? Porque no
veían el Sol.
-¿Camus no lo veía?
-Ese era un africano, cosa que no hay que olvidar
nunca. Me gusta mucho. Pero me gusta más Valéry. Valéry y Nietzsche. (Me mira,
tras sus anteojos redondos). ¿Sabes?, lo malo de las entrevistas es que nunca
transcriben el tono en que uno dice las cosas. Por ejemplo, una cosa muy
significativa en México y que nadie dice, es que los escritores tenemos hambre,
aunque queremos esconderlo. De acuerdo con las tablas de la nutrición, los
escritores estamos al borde de la anemia perniciosa. (Salvador se pone a
caminar un poco encorvado para demostrármelo. Y de nuevo se asoma a la ventana
frente a la cual bailan los árboles impulsados por el torbellino.) ''¿Qué no
oyes a alguien gritar mi nombre, Salvador?”
Salvados por la lectura, devoramos tropos, cuartillas que no sacian. Los
lectores tenemos a los escritores para la dieta. La confabulación de los
libros, personajes, escritores, poetas clamando allá en donde no hay aparato,
ni platillo, ni beso alguno más excitante.
He conocido a Salvador Elizondo, tardíamente, siento culpa. Ahora sé de
un descanso interrumpido de los muertos. No hay escritor en paz, nosotros los
lectores siempre los invocamos, nadie ha dicho que es cierta nuestra soledad:
¡Salvador!
8 ¿Qué me cuentas?:
¡no hay escritor solo ni escritor que descanse! ¡Muy bien Belkys! Te diría también que ¡no hay escritor que muera realmente!. Te mando un saludo especialmente afectuoso....
Son muchos los escritores que descubrimos tardíamente, estimada Belkys.
Nos faltará vida para conocerlos a todos.
Abrazo.
¿Por qué tanto tiempo de silecio, Belkys?
Espero estés bien.
Por cierto se trata de silencio...y no de silecio.
belkys que gusto pasar por aqui y poder dejarte un saludo, siempre es grato pasar por tu blog, saludos y un abrazo desde mi mi monterrey querido
Lao larga vida a los escritores que nos hacen la existencia llevadera y con palabras nos construyen otros derroteros, nos cambian el destino.
Esteban cuando miro mi biblioteca, siento ese temor, que no alcance vida para leer tanto como quisiera o releer tanto como necesito
Geminis, gracias por pasar, gracias por permanecer.
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